San Luis de la Paz dio este fin de semana un paso relevante en materia ambiental con la reapertura del Vivero Municipal, un espacio que renace con nueva infraestructura y un enfoque renovado para impulsar la reforestación y la educación ambiental en la región.
El vivero, ubicado en el predio El Chorrito sobre la carretera San Luis de la Paz–Victoria, ahora funcionará como centro de producción y resguardo de especies forestales, ornamentales y comestibles que serán utilizadas en proyectos de restauración ecológica y recuperación de áreas verdes en el municipio.
En la reinauguración participaron el alcalde Rubén Urías Ruiz, la presidenta del DIF Municipal Irma Sánchez Cano y la directora de Protección al Ambiente Brenda Gabriela Vélez Vázquez, quien destacó que contar con un vivero activo permitirá fortalecer la cultura ambiental desde la niñez y hacer frente a los efectos del deterioro ecológico con acciones concretas.
La rehabilitación del espacio incluyó la plantación de más de 20 árboles nativos, frutales y ornamentales, además de alrededor de 100 plantas polinizadoras, fundamentales para recuperar zonas afectadas y favorecer la biodiversidad. También se realizaron podas sanitarias y el retiro de ejemplares que ya habían cumplido su ciclo de vida.
El vivero ahora integra un área de germinación tipo invernadero, una zona de sombra con malla del 80%, sistema de riego automatizado, una cisterna de 10 mil litros y una palapa destinada a talleres, actividades escolares y encuentros comunitarios.
Durante el evento, el alcalde señaló que este espacio simboliza una apuesta al largo plazo:
“Aquí nace vida. Aquí crecen árboles que un día darán sombra, alimento, oxígeno y belleza a nuestras calles y comunidades”, expresó.
La directora Brenda Vélez adelantó que el vivero impulsará programas de adopción de árboles, huertos urbanos y proyectos de restauración ambiental, además de servir como punto de encuentro educativo para niñas, niños y jóvenes.
Con esta reapertura, San Luis de la Paz reafirma su intención de construir un municipio más verde, preparado para enfrentar los retos del cambio climático y comprometido con la preservación de su entorno natural.
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